Se consagró el 26 de noviembre de 1602, hallándose presente en este Acto Miguel de Cervantes. Tiene planta rectangular con cubierta a dos aguas. Por una ventana lateral de medio punto penetra la única luz natural que ilumina el lugar.
En su decoración destaca un altar Barroco de estilo churrigueresco, barroco tardío que se caracteriza por el recargamiento de la decoración y las columnas retorcidas o columnas salomónicas. En el centro del retablo aparece San Roque. El cuadro que adorna la parte más alta del retablo es la Virgen del Carmen y a ambos lados de San Roque hay dos evangelistas.
Las esculturas que hay a ambos lados del retablo representan a San Sebastían martirizado con las flechas y a San Esteban vestido de obispo.
La ermita se edificó sobre unos terrenos cedidos por la familia Quijadas de Esquivias, distante 80 m. de la vivienda que ocupaban Cervantes y Catalina.
Su fiesta se celebra el día 16 de agosto con una misa y procesión en honor del Santo.